Vayamos "Al Grano"

Murphy reaparece…
Te pasas la noche dando vueltas en la cama, pensando en la ropa que vas a ponerte, los zapatos, el peinado… todo esto no sirve de nada porque al día siguiente cuando te pruebas el conjuntito elegido te das cuenta que el vestido te queda pequeño y pareces el muñeco de Michelín, piensas que los zapatos te harán daño, y por eso siguen sin estrenar después de dos años… y el peinado… te lo alisarás como siempre, para que experimentar? Entonces le das mil vueltas al fondo de armario y decides ponerte lo menos pensado, realmente te pones algo que ni recordabas que lo tenías…
Quieres estar impresionante, divina de la muerte, pero que no se note, algo así como… me he puesto lo primero que he encontrado, cualquier cosilla… mentira cochina!!! Y es que la ocasión lo merece, la cita de hoy es muy importante.
Es a medio día, pero te levantas muy temprano para “tener tiempo”, duchita y empieza el ritual de “restauración”, mierda! cuando te miras al espejo te das cuenta que a parte de las ojeras de no dormir, una pupita en labio debido a alguna calentura, bueno eso tampoco está tan mal, mientras se mantenga en su fase inicial lo hace más sexy, pero lo peor es el grano desagradable que se deja ver en plena cara, y que no es fruto de la pubertad sino del turrón de chocolate del resopón de anoche… Horror!!! Esto no lo arregla ni el mismísimo Sr. Bourjois en persona!!!
Decides ir al grano, nunca mejor dicho, y utilizar los viejos trucos de adolescente…, pasta dentífrica, antes funcionaba!!! :-), así que pegote al canto!
Que pinta Dios mío! El antídoto contra la lujuria… viéndome así no me puedo creer que la operación sea un éxito, pero lo fue, y atrás quedó eso de “aunque la mona se vista de seda, mona se queda”, eso es porque no conocen los exfoliantes, las hidratantes…y sobre todo el “Miracle touch” liquid illusion foundation de Max Factor o los “Watershine Gloss Diamonds” de Maybelline…
Salgo a la calle para dirigirme al lugar de la cita, con tiempo eso sí, vaya a ser que el metro no funcione, pierda el autobús, no sé, o cualquier otra cosa de esas que me pasan a mi “demasiado” a menudo…, toda mona, impecable, luciendo palmito!
Una vez en la parada del bus, me llega un sms, sorpresa! “hoy me va mal quedar, te importa si quedamos otro día?”… :-(((
Decido volver a casa, quitarme los tacones, plantarme los jeans, calzarme las botas y marcharme de compras… al final, gracias a un amigo, (que no sé si se percató del dichoso granito), se arregló el día!