Quiero ver la casa reformada, nada de grietas disimuladas que en cualquier día de lluvia amenacen con brotar… quiero por fin ver en la terracita plantas llenas de flores de mil colores que poder regar, esas cortinas nuevas tras las que se esconden ventanas abiertas que el aire cálido, el olor a tierra y el sol radiante dejen entrar… No sé que debería hacer, si dormir en el salón mientras reforman la habitación o esperar observando desde fuera hasta que abran nuevamente la puerta y digan, ya puedes pasar…
Lo que está claro es que hagas lo que hagas no ayudará a que se agilicen las obras, no por nada, pero te das cuenta que no tienes ni idea por donde empezar, si tienes que tirar una pared, poner ladrillos, enmasillar o simplemente pintar…
Sé que parece sencillo, pero hay reformas que duran una eternidad, algunas se quedan en simples proyectos escritos en alguna libreta roja... pero lo importante es empezar, y que al terminar sientas que por fin es tu hogar, que es tu lugar, que las molestias que te han causado, el polvo que han levantado, los escombros, la espera… que al final todo ha valido la pena!!!
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